Un suplemento chino para la disfunción eréctil que se llama Huang He fue prohibido en Argentina tras descubrirse que contiene aminotadalafilo, una droga que no está aprobada para uso humano y de la cual no informa en el prospecto. El producto se vende como alternativa natural del Viagra y en su caja explica que contiene una combinación de estimulantes beneficiosos para los hombres durante el acto sexual, sin mencionar la droga en cuestión.
Entre los beneficios que menciona la caja de Huang He está que “corrige la impotencia, controla la eyaculación precoz, combate la disfunción eréctil, erradica la falta de deseo, hace efecto en menos de una hora, es apto para pacientes diabéticos y/o cardíacos, no provoca efectos colaterales ni secundarios, es totalmente natural, y su acción dura hasta 6 días”.
Un grupo de expertos del Hospital de Clínicas y de la Facultad de Farmacia y Bioquímica de la Universidad de Buenos Aires (UBA), examinaron el producto y descubrieron que no solo contiene Panax ginseng, Astragalus membranaceus, Schizandra chinensis, Ginkgo biloba y vitaminas, sino que el secreto de las cápsulas mágicas radicaba en el aminotadalafilo, droga que pertenece a la familia de los inhibidores de la fosfodiesterasa 5 (iPDE5), dentro de la cual se encuentra el Viagra o Sildenafil.
Según explicó el doctor Edgardo Becher, profesor adjunto de Urología de la UBA y autor del estudio, en el Diario La Nación, “no sólo los pacientes que consumen estos compuestos «naturales» no sospechan que pueden contener drogas no declaradas, sino que el aminotadalafilo no está aprobado para su uso medicinal”.
“A ciencia cierta, no se conoce cuáles son los riesgos que conlleva su consumo porque no es una droga estudiada. Todos los inhibidores de la fosfodiesterasa 5 tienen una contraindicación de clase que es que no pueden ser utilizados por pacientes que consumen nitratos o nitritos, que son drogas que se utilizan en la enfermedad coronaria, ya que la combinación puede producir una fuerte hipotensión arterial y hasta causar la muerte del paciente”, advirtió en un estudio que fue publicado en el Journal of Sexual Medicine.
“Tenemos varios pacientes que consumen estos suplementos por cuenta propia y veíamos que muchos tenían los efectos terapéuticos (mejoría de la función eréctil), pero que también nos referían efectos adversos similares a los clásicos de los iPDE5, como cefaleas, rubor, en algunos casos lumbalgias -relata el doctor Becher, urólogo del Servicio de Urología del Hospital de Clínicas-. Esto nos llevó a pensar que probablemente estos compuestos contenían alguna molécula no declarada. Y las sospechas fueron confirmadas”, aseveró.