El jugador, que hace menos de 20 días terminó con  la suspensión de cuatro meses por incumplimiento contractual con Tigres en 2010, recibió un ofrecimiento del fútbol de Estados Unidos que resulta irrechazable desde la parte económica.

Debido a ello, Fernández se contactó en varias ocasiones con las autoridades de Estudiantes para intentar agilizar su salida.

El problema es que por el posible alejamiento de este futbolista, el Pincha reclamaría el cobro anticipado de un monto a definir, por considerar que se incurría en lucro cesante, dado que el jugador tiene contrato vigente con el club.