Un nuevo golpe al bolsillo se suma a la ya larga lista de aumentos y ajustes de los últimos meses. A partir de ahora, los colegios privados de la provincia de Buenos Aires comenzarán a cobrar una cuota extra en concepto de “equipamiento tecnológico”. Se trata de un plus que se cobra de una vez por año y equivale en muchos casos al 10% del valor de la matrícula.

Los padres ya fueron notificados y las quejas no se hicieron esperar. Se trata de una disposición del área de Educación Privada (Diepregep) de la Dirección de Escuelas bonaerenses, que fue aprobada el 2 de diciembre de 2015, una semana antes de la llegada del nuevo gobierno.

Según la resolución, los colegios podrán cobrar ese plus como compensación por la “actualización y mantenimiento” de los equipos tecnológicos que hayan comprado el año pasado. “Este monto permitirá a los establecimientos educativos privados continuar brindando a sus alumnos una educación de calidad, que no se vea condicionada por falta de insumos o la desactualización de los mismos”, justificaron.

Desde las escuela aclararon que para aplicar el ajuste, los establecimiento educativos deberán presentar las facturas de las compras tecnológicas realizadas en 2015 y si los padres advierten que les cobran a pesar de que no hubo mejoras pueden denunciar ante los inspectores.

El monto extra se sumará así a la inminente suba en el valor de la cuota que comenzará a discutirse la próxima semana. Los dueño de los colegios pretenden aumentar un 30%, mientras que desde la dirección de Escuelas abogan por un incremento que no supere el 25. Como sucede año a año, la discusión se hace después del cierre de la paritaria docente, que este año fijó una mejora del 34,6%, aunque casi un tercio de ese monto lo financia la Nación.

Desde las asociaciones además estiman que el incremento se aplicará en dos cuotas, una en marzo (retroactiva) y otra a mitad de año. El año pasado, se aprobó un aumento del 29,7% en los aranceles. El 23% lo pagaron a principios de abril y el segundo tramo se completó en agosto.

En Buenos Aires hay 5.500 colegios privados, de los cuales el 80% recibe subsidios para pagar algo o la totalidad de los sueldos docentes. Alfredo Fernández, abogado de la Asociación de Colegios Privados defendió el ajuste y dijo se aplicará a los establecimientos que reciben ayuda estatal.

“Acá hay un objetivo primordial que es mejorar la calidad educativa. “Esta cuota no tiene que ver on los aranceles. Es una cuota con una especificidad. La van a cobrar solamente todos los colegios que tienen aporte estatal. Los gastos de los colegios se pagan con los aranceles. La cuota del colegio privado equivale a 400 gramos de asado. Esta muy barata”, expresó.